Con la llegada del otoño, a menudo se habla sobre los beneficios de una desintoxicación basada en uvas. Para entender la acción desintoxicante de esta fruta, hace falta interesarse en su composición. Tiene un contenido alto de potasio y un bajo contenido de sodio, lo que acelera la eliminación renal y le confiere efectos diuréticos. Los granos de uva tienen también la ventaja de contener una gran cantidad de agua y de fibras dietéticas que favorecen la eliminación de deshechos y la purificación del organismo. Los granos de uva merecen su lugar en la cura desintoxicante, en particular, complementando potentes quelantes de metales pesados, tales como la zeolita clinoptilolita.
Además de contener potasio y fibras dietéticas, la uva tiene otros nutrientes benéficos para el organismo. Aporta otros minerales como el cobre, además de vitaminas como algunas vitaminas B y la vitamina C. Todas estas sustancias participan en el buen funcionamiento del organismo. La uva puede igualmente ser muy provechosa para recuperar el tono y la vitalidad gracias a su composición en carbohidratos. Esta fruta tiene un alto contenido en azúcares rápidos, lo que permite aportar energía a los músculos en tiempo record. Esta ingesta energética es ideal para revitalizar el organismo, especialmente después de una actividad física intensa.
Seguramente hayas oído hablar de la paradoja francesa, o “french paradox” en inglés. Esta expresión anglosajona hace referencia a una declaración contradictoria de la población francesa. A pesar de que siguen una dieta alta en grasas y de que consumen regularmente vino tinto, los franceses tienen un menor riesgo cardiovascular que otras poblaciones en el mundo. La explicación a la “french paradox” se encuentra en la composición de las uvas: los polifenoles. Estos son poderosos antioxidantes naturales que tienen efectos protectores en el organismo, especialmente en la salud cardiovascular. También se puede apostar por este efecto cardioprotector en un extracto de semillas de uva rico en antioxidantes que está integrado en la fórmula VeinoMax.
Gracias a su alto contenido en polifenoles, la uva también tiene un alto potencial anti-envejecimiento. De hecho, la actividad antioxidante de los polifenoles permite oponerse al estrés oxidativo, un fenómeno implicado en el envejecimiento prematuro del organismo. Según los estudios realizados sobre la uva, esta acción anti-edad sería esencialmente debida al resveratrol, uno de los antioxidantes más potentes conocidos hasta la fecha. Este compuesto, que ha sido muy estudiado, ha revelado efectos beneficiosos para la prevención de diferentes enfermedades relacionadas con la edad, incluyendo ciertas patologías cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer. Los trabajos realizados sobre esta molécula anti-edad han permitido identificar y aislar su forma bioactiva: el transresveratrol. Esta sustancia es muy apreciada en la suplementación nutricional. Para reforzar su eficacia, este polifenol de la uva se suele asociar con otros antioxidantes, como es el caso de los complejos Resveratrol Synergy y AntiOxidant Synergy.
Como puedes ver, las uvas están llenas de beneficios para la salud. A pesar de que sus efectos anti-edad y su acción cardioprotectora se mencionan a menudo, las propiedades terapéuticas de esta fruta son, en realidad, mucho más numerosas. Por ejemplo, los polifenoles también han demostrado tener resultados positivos en la lucha contra ciertas enfermedades de la piel, como el eccema. También se han estudiado por sus efectos benéficos en la prevención de problemas de visión. Por esta razón se ha añadido un extracto de semilla de uva a la formulación OptiVision, un complemento alimenticio dedicado a la protección de la vista.
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